Especie: Ulmus campestris L. Olmo común.
Este olmo de grandes proporciones acabó de secarse, como otros olmos de ribera, en el verano de 1989, a causa de la enfermedad llamada Grafiosis. En su lugar se colocó el llamado olivo «del abuelo», proveniente de los olivares de Trasmón, pero que también se secó al querer realzar su elegante figura. Ocupa su lugar otro olivo.
Cuenta José Gracián que en invierno las campanas tocaban a las ocho y media de la mañana y a las dos de la tarde, y en verano a las ocho y a las tres, llamando a los chicos a las escuelas y a los jornaleros a su trabajo, que salían a los campos desde los portales de San Roque y de San Pedro, y desde el olmo, que eran los lugares de reunión y espera. Todos los jornaleros que hubiesen salido de estos lugares, tenían ganado el jarro de vino que el propietario les ofrecía, aunque la lluvia o el mal tiempo impidiera acabar la jornada.
En Canto a mi tierra, libro póstumo de Paterno Pina Pérez (1893-1965), se publicó un poema al olmo, que el Ayuntamiento de Saviñán trasladó a un mural, que fue inaugurado el 17 de agosto de 1995. (Enebro, nº 11, 1995). Dice así:
Prócer y noble anciano,
barbudo y corpulento,
que a la orilla del río
en la entrada del pueblo,
saludas al que llega,
con los brazos abiertos.
Eres como un patriarca,
eres como el abuelo
de cien generaciones,
que desde aquí partieron
a plantar otras tierras,
a poblar otros suelos.
prócer y noble anciano,
de fortaleza ejemplo,
que sujetas tus carnes
con cinturón de hierro.
Pasarán muchos años
con su largo cortejo,
de lluvias y huracanes,
que azotarán tu cuerpo.
Pasarán nuestros hijos,
pasarán nuestros nietos,
y tú, seguramente,
seguirás en tu puesto,
a la orilla del río,
desafiando al tiempo,
vigilando la entrada
de nuestro amado pueblo,
esperando al que llegue
con los brazos abiertos
y apretando tus carnes
con cinturón de hierro.
Situación y acceso: Se situaba al lado del puente de piedra, junto al río, en el viejo camino a las huertas.